El riesgo que corre tu bebé al dormir en la cama contigo

El colecho es un término que no aparece en el diccionario de la Real Academia Española pero que a muchos padres les resultará familiar. Esta palabra define la práctica de compartir cama padres e hijos.

Antiguamente podía darse aún más el caso por motivos de poco espacio pero hoy en día si que existe la oportunidad de dormir por separado. Aunque esta nueva moda cada día tiene muchos más seguidores, pero ¿Hasta que punto es una práctica segura?

Uno de los motivos positivos por los que se defiene esta práctica es porque muchos consideran que esto facilita el apego y la lactancia materna. Pero mucho no saben que la mayoría de pediatras y organizaciones internacionales consideran el colecho como una práctica peligrosa.

No se recomienda concretamente en hacerlo en menores de seis meses ya que el riesgo de asfixia o aplastamiento es mucho más elevado. Lo más seguro es que los bebés duerman boca arriba y en su propia cuna en la habitación de los padres.

El colecho puede provocar una muerte por asfixia al tapar las vías respiratorias del bebé o porque sin quererlo por la noche lleguemos a aplastar al niño o se encuentres muy tapados por las mantas. Esta práctica es tal que se conocen casos en los que los padres lo han llegado a hacer en el hospital y neonatos han acabado en el suelo.

Aunque pueda ser beneficiosa esta práctica para reducir el riesgo de muerte de súbita la Asociación Española de Pediatras no recomienda esta práctica en: “Lactantes menores de tres meses de edad, prematuridad y bajo peso al nacimiento, padres que consuman tabaco, alcohol o fármacos sedantes. Situaciones de cansancio, especialmente de cansancio extremo, como el postparto inmediato. Colecho sobre superficies blandas, colchones de agua, sofá o sillones o compartir la cama con otros familiares, con otros niños o con múltiples personas".

Para evitar los riesgos de esta práctica pero no queremos renunciar a dormir lo más cerca posible de nuestro hijo existen las cunas sidecar. Este invento permite que exista la opción de adosar una cama o cuna a nuestro colchón. Así evitaremos algún riesgo seguro y facilitaremos el apego y la lactancia materna.

¿Y tú? ¿Prácticas el colecho o no? Cuéntanos tu experiencia como mamá o papá.