'Yo vengo a ofrecer mi corazón': una buena dosis de solidaridad de la buena con Fito Páez
Tiempo de lectura: 2’
Junio. Mes de verano y vacaciones a la vista. El curso se disipa como por un vuelo fugaz y toca adentrarse en los calores que impiden salir a los mortales en las horas centrales y, a veces, hasta casi en todo el día. Mes de temperaturas que se hacen desagradables en el achicharramiento del calor solar, pero que ayudan a a acompañar al Santísimo en su huida a las calles siguiendo la venerable y tradicional costumbre de asomarse en un día como este como un remate pascual.
Procesión entrañable que es un encuentro con el Señor por nuestros lugares de vida con los hombres, rodeado de flores y guirnaldas, y también por lo más recóndito de nuestro corazón que busca estar henchido siempre de solidaridad. Por algo es el Día de Caridad. Como el tema de Fito Páez que hoy traemos a colación, titulado “Yo vengo a ofrecer mi corazón”.
Tomado de su sencillo Giros, sale a la luz en 1985 y es el segundo sencillo de este cantante argentino. Dentro de él se incluye el tema “Yo vengo a ofrecer mi corazón” con un sentido netamente fraterno y de ayuda solidaria a los demás. La melodía se denomina de ritmo chacarero, un formato de algunas zonas del país de habla hispana, como puede ser Santiago del Estero. La melodía se compone con guitarra, violín y bombo legüero. Este último instrumento es un bombo que se puede oír a leguas, de ahí ese término que le denomina de forma tan característica.
El tema va repasando circunstancias de la vida y llama al amor luna de mi corazón. El cantautor argentino, ante la situación miseria y de problemas que surgen, sigue reclacando “Yo te doy mi corazón” a modo de estribillo que, aparentemente parece muy reptitivo, pero que es el “alma mater” del tema, sin cual perdería su sentido y esencia. Es una muestra de amor solidario ante cualquier circunstancia y no importa la situación de cada persona.
El cántico está avalado por toda la crítica musical como una declaración de intenciones a favor de la solidaridad, donde se ha utilizado en muchas situaciones contra la libertad tanto en Buenos Aires como en el resto del Nuevo Mundo. En 2015 se hizo una versión remasterizada que revisó Fito Páez.
