El viaje al que debemos agradecer que Lola Índigo decidiera ser cantante: "Me fui a por ello"

Hay veces que uno necesita que le haga un clic especial la cabeza para darse cuenta de que, realmente, el sendero por el que está transitando profesionalmente no le termina de convencer. Eso es lo que le pasó a Lola Índigo hace unos años, y el punto de inflexión lo marcó un viaje que, tal y como reconocía durante la charla en nuestro pódcast 'Modo avión', es el primero que se le viene a la cabeza a bote pronto. Ella era la última invitada que se subía a esta experiencia original de CADENA 100 y presentada por Antonio Hueso y, como decimos, al preguntarle el locutor de CADENA 100 por esa travesía que es la que le aparecía en la memoria en ese instante, no dudaba en responder, de manera muy contundente: "Tailandia, porque es una pasada".

Todo tenía su explicación, con el conveniente desarrollo que comenzaba así: "Me fui a Puket, estuve 20 días sola porque estaba en una época un poco raruna, tenía un par de curros de bailarinas y ese verano me quedé sin curro, que yo ya había vuelto a Madrid. Con los ahorrillos que me quedaban de lo que había ganado en China dije: 'Me voy a Tailandia y me encuentro un poco'.". ¿Qué fue lo que pasó? "Ahí, conociendo gente y hablando un poco con ellos y conmigo misma, me di cuenta de que, en realidad, quería cantar. Ahí me atreví a verbalizarlo", relataba en ese trozo que puedes ver dando al 'play' sobre la imagen en la parte superior de esta noticia.

La consecución de un sueño

"Era una cosa que siempre la había tenido en mi cabeza y en mi corazón, pero es verdad que, cuando uno ya tiene una carrera de bailarina tan desarrolada y buena como la que yo llegué a tener, te da un poco de miedo ser la bailarina que va de cantante o todos estos prejuicios que tienen los demás", proseguía con ese ataque de sinceridad -una de las cualidades que resaltan en Mimi-. "Ahí me atreví a decir: 'A tomar por culo todas mis inseguridades'. Y me fui a por ello. Cuando volví a Madrid, con lo que ahorraba de bailar, empecé a pagarme mis clases de canto, cosa que no podría haber hecho antes en mi vida, porque son carísimas. Con lo que vale una clase de canto, vas un mes a una academia de baile. Por eso, una empezó a bailar", terminaba esa respuesta...

...que llevaba a la pregunta lógica de Antonio de si, el hecho de que fuese sola, habís sido determinante para dar el paso. "No lo sé, el caso es que lo hice. Es verdad que allí había un 'camp' de baile y me encontré con varios amigos, aparte de todo el tema de los templos y las rutas que me hice, también iba todos los días a clases de baile. Entonces, también tenía ese estímulo artístico, no estaba como de yogui", era la réplica que ofrecía esta mujer que está a punto de lanzar su álbum 'El Dragón' y cuyo pódcast completo te dejamos bajo estas líneas para que puedas volver a disfrutarlo cuantas veces te apetezca.

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