El beso de Anna Ferrer a Paz Padilla en el funeral de su marido que le llenó de fuerza para afrontar su despedida

Hace una semana que falleció Antonio Juan Vidal, el marido de Paz Padilla, y desde entonces son muchas las muestras de cariño que le han dedicado fans, amigos y compañeros en las redes sociales. La presentadora se está intentando recuperar de este duro golpe que le ha dado la vida y, aunque no está siendo fácil, tiene un apoyo fundamental que le está ayudando a seguir adelante: su hija Anna Ferrer.

En el funeral, que tuvo lugar en Zahara de los Atunes (Cádiz), un lugar muy especial para la pareja ya que fue donde se conocieron y donde años después se casaron, no faltó ni un detalle. Coronas de flores con emotivos mensajes, cantos, bailes y hasta incluso un monólogo de la humorista que le dedicó a su marido para despedirse como a él le habría gustado: con una sonrisa. Si ya nos conmovió el abrazo que le dio Paz a su hija Anna antes de entrar a la iglesia, mucho más este beso que ha querido compartir con todos la joven.

Anna Ferrer, el mayor apoyo de Paz Padilla

Paz Padilla está muy bien rodeada, no le falta cariño ni amor, pero en este duro duelo tras la pérdida de su marido, tiene claro que su mayor pilar es su hija Anna Ferrer, y lo ha demostrado con cada una de las palabras que le ha dedicado en sus redes sociales. ''Me gustaba la familia que formábamos. Nunca podré agradecerte todo lo que me has enseñado. Sé que nos seguirás cuidando como siempre hacías. Avanza, te quiero'', fue la dedicatoria que escribió al que fue como su padre durante varios años.

Ahora ha reaparecido para regalarnos una foto inédita junto a su madre en la que aparecen ambas abrazadas y ella le da un tierno beso a su madre en la frente, intercambiando papeles como cuando ella era pequeña y era Paz quien se lo daba. Un momento mágico entre madre e hija que se produjo el día del funeral de Antonio, el amor de la vida de la presentadora, que falleció a los 53 años tras una larga lucha contra un tumor cerebral.

El sobrecogedor mensaje de Paz a su hija Anna

''La persona más fuerte que conozco con lo pequeñita que todavía eres, enfrentarte a la muerte sin miedo'', escribió Paz Padilla en sus redes sociales refiriéndose a su hija, quien le ha dado una lección de vida por su entereza y saber estar frente a una situación tan delicada como es la pérdida de un ser querido de manera tan drástica. “No le soltaste la mano, estuviste a los pies de su cama, le diste tanto amor. Podías haber huido como hicieron otros (por cobardía), pero tu amor hacia él, tu amor hacia mí, ha sido tanto... que amortigua un poco mi dolor y me calma, porque sé que harás por mí lo mismo que hicimos por él, acompañarle hasta su último aliento con una sonrisa, deseándole el mejor de los viajes y diciéndole gracias por ser el padre que me hubiera gustado tener”, añadió. “¡Mi guerrera de la vida! Te quiero Anna y sabes que Antonio te protegerá y nos mandará un regalo,lo volveremos a ver en el Valhalla. ¡Gracias!'', concluyó.

Paz y Anna, más unidas que nunca

Paz Padilla y Anna Ferrer tienen una relación muy especial. Madre e hija nos han enamorado a todos en muchas ocasiones por cómo son, cómo se quieren y cómo se cuidan. Pero durante los últimos meses y más concretamente, esta semana, han dado una lección de vida y un ejemplo a todos inolvidable. Además de la una a la otra, que son recírprocamente su mayor apoyo. En los últimos cinco meses han despedido a Doña Lola, la ''abuela de todos'', por la simpatía que tenía la madre de Paz y lo querida que era por la audiencia, y a Antonio Juan Vidal, el gran amor de la presentadora y un gran amigo y apoyo de Ana. Junto a la hija de Antonio de su anterior matrimonio, habían formado una familia especial en la que no faltaba el amor. Y esto es algo que ha quedado muy claro en la despedida de Antonio.

Gracias a las conversaciones que Padilla ha tenido con sus compañeros de 'Sálvame', hemos podido comprobar que ''Anna está siendo clave para Paz en estos momentos, siempre, pero todavía más en estos momentos'', dijo Belén Esteban. Anna es una joven discreta, formal, madura y responsable, y con el sentido del humor y forma de ver la vida que su madre. Padilla se ha esforzado mucho para que Anna sea una niña feliz y lo ha conseguido, porque a pesar de estar siempre bajo el foco, por ser hija de quien es, Ferrer siempre se ha mantenido en su línea, dando sus pasos correctos y aprendiendo y disfrutando del camino. Algo que siempre le enseñó su madre.

Durante los últimos días hemos visto muchos momentos de ambas, su abrazo en las puestas del funeral de Antonio Juan nos conmovió a todos, pero todavía ha generado más amor en redes sociales el que se dieron al atardecer mirando el sol y la luz de Vidal, que ''ahora las ilumina desde otro lugar''. Un momento muy emotivo y muy especial, con el que se dan fuerza, se apoyan y arropan. Ambas, casi sin pretenderlo se han dado una lección de vida. La fortaleza y entereza, la forma de aprender a despedirse y esa delicadeza y amor con la que han complido la última voluntad de Antonio, pese al momento tan duro que viven, ha sido realmente emotiva y ejemplar.

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