El verano es un estado mental: consejos para no deprimirte tras la vuelta de vacaciones

Los días de escapadas, playa y piscina están llegando a su fin pero tenemos que seguir disfrutando de cada momento
El verano es un estado mental: consejos para no deprimirte tras la vuelta de vacaciones

 

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El mes de agosto se está acabando y es inevitable pensar que queda poco para que el verano llegue a su fin. Todavía quedan unas semanas para seguir exprimiendo al máximo las horas de sol y el tiempo libre pero el síndrome postvacacional está a la vuelta de la esquina.

Muchos ya hemos empezado a trabajar de nuevo y se hace duro después de tantos días de desconexión que hemos disfrutado en vacaciones. Es por ello que te damos una serie de consejos que puedes seguir para sobrellevar mejor la vuelta a la rutina.

Leer un buen libro

No hay nada mejor para desconectar que leer. Elige un libro que te guste y que sepas que su historia te va a atrapar de principio a fin. Las horas se te pasarán volando y te olvidarás de todo por unos momentos. Da igual la temática siempre y cuando te resulte atractiva y te haga desconectar. ¡Pruébalo!

Ver películas y series

La sensación es parecida a la de leer un libro pero esta vez puedes estar acompañado de más gente. Júntatecon quien tú quieras, enciende la televisión y elige una película o serie. Romántica, de acción, de dibujos animados, dramática... ¡hay muchos temas donde elegir! Y si escoges una y no te gusta, la cambias. Lo importante es la compañía.

Rodearte de tus seres queridos

Esto nunca falla. Cuando estamos en familia o con los amigos somos felices y nos olvidamos de todo lo que nos rodea. Los problemas desaparecen y tan solo con una conversación conseguimos arreglar el mundo. Es una buena manera de desconectar y no pensar en nada más que en quererse y coleccionar momentos juntos que nunca olvidarás.

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Hacer deporte

Al hacer ejercicio liberamos hormonas como la serotonina o las endorfinas, conocidas como las hormonas de la felicidad. Se liberan después de la actividad física y produce una sensación de felicidad que te hace olvidar cualquier problema en ese mismo instante. Además, estas hormonas reducen la sensación de dolor y alejan de nuestra vida el estrés y la ansiedad. Y por qué no, también podremos deshacernos de esos kilos de más que hemos cogido durante las vacaciones y sentirnos mejor con nuestro cuerpo.

Dormir 8 horas diarias

Son las horas de sueño recomendadas por la Organización Mundial de la Salud para un adulto. Esta norma hay que cumplirla durante todo el año pero nos cuesta más al volver de vacaciones. En verano dormimos más porque no tenemos horarios y cuando empieza de nuevo la rutina, es difícil adaptarse. Una buena manera de conseguirlo es ponerse la alarma unos días antes de empezar a trabajar para adaptar a tu cuerpo a dormir menos horas. ¡Un truco fácil y que funciona!

Recuerda: el verano es un estado mental y podemos vivir siempre en esta época del año si nos lo proponemos. Solamente hay que pensar en esas cosas que nos hacen felices y  nos olvidaremos de que las vacaciones se han terminado porque el tiempo pasará volando hasta las siguientes si disfrutamos de las pequeñas cosas que nos da la vida.

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