El estudio que demuestra que las ratas también bailan al son de la música como los humanos

Un estudio ha demostrado que las ratas también responden ante los mismos estímulos que los humanos cuando suena la música
Las ratas también bailan cuando suena música

Tiempo de lectura: 2’

No sabemos cómo reaccionaría una rata al escuchar la mejor variedad musical en CADENA 100, pero sí han podido comprobar varios estudios científicos que estos roedores son capaces de reaccionar bailando como los humanos cuando escuchan música. La revista Science Advances así lo ha anunciado publicando todos los datos que han conseguido demostrar desde este estudio elaborado por investigadores japoneses. Concretamente, han descubierto que las ratas mueven la cabeza siguiendo el ritmo de la música, tal y como haríamos nosotros y con los mismos movimientos.

Algo que hacen cuando el ritmo musical alcanza los 120-140 golpes por minuto (BPM), que es el que se utiliza habitualmente en la composición musical. Un estudio que permite conocer mejor la mente de los animales, que también reaccionan al oír estos ruidos que corresponden al ritmo de una canción. Desde esta revista han compartido diferente imágenes en las que lo explican, con las partituras que han utilizado como base, que corresponden a la música de Mozart.

Las ratas reaccionan a la música como los humanos

"Las ratas mostraron una sincronización innata -sin ningún tipo de entrenamiento o exposición previa a la música- de los ritmos, más claramente dentro de los 120-140 bpm, a los que los humanos también muestran la más clara sincronización", ha explicado Hirokazu Takahashi, que ha participado en este estudio de la Universidad de Tokio. Una investigación en la que participaron veinte personas y diez ratas y en la que se llegó a la conclusión de que el tempo óptimo para la sincronización del ritmo depende de la constante de tiempo en el cerebro, demostrando que el cerebro animal también percibe la música.

A las ratas se les colocó en la cabeza para medir sus movimientos acelerómetros inalámbricos minúsculos, algo que en el caso de los humanos lo llevaban incorporado en los auriculares por los que estaban escuchando la música. Concretamente la Sonata para dos pianos en re mayor, K. 448, de Mozart, a cuatro tempos diferentes: 75%, 100%, 200% y 400% de la velocidad original. Y el resultado final determinó que tanto las ratas como los humanos sacudían la cabeza al compás de un ritmo similar, disminuyendo su intensidad cuanto más se aceleraba la música.




La conclusión del estudio musical entre ratas y humanos

"Hasta donde sabemos, este es el primer informe sobre la sincronización innata del ritmo en animales que no se logró mediante el entrenamiento o la exposición musical", ha indicado el investigador de la Universidad de Tokio donde se ha elaborado este estudio. Y próximamente les gustaría ampliarlo para medir también la armonía y la melodía, algo que ha considerado clave para entender cómo funciona el cerebro y desarrollar la inteligencia artificial de cara a las futuras generaciones.



Relacionados

CADENA 100