La confesión de Elena Tablada sobre quién rompió su relación con David Bisbal: "No voy a decir que el único"
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Se sentó en el plató de 'De viernes' y el pequeño avance que habían ofrecido desde Telecinco ya hacía presagiar que la intervención de Elena Tablada iba a traer curvas. Porque la diseñadora, que acaba de participar en el espacio de entretenimiento de la cadena 'Bailando con las estrellas', no esquivaba el tema de David Bisbal, aquel enganchón público con Rosanna Zanetti por una foto de su hija en redes sociales y qué es lo que llevó a que todo se precipitara entre ellos para acabar por romper.
"No funcionó porque había muchos contaminantes. No me refiero a nadie en especial", comenzaba, tratando de que los focos no recayeran sobre la figura de la mujer actual de su ex. "Lo que más daño hizo a mi relación con David fue la prensa. Entonces, el triángulo se ve afectado no solo por una persona. Hay muchos contaminantes. No siempre está contaminado, como en todas las relaciones y más en las exrelaciones, que es una montaña rusa y una época estamos bien, otras veces estamos peor. Porque es un poco la dinámica de vida de ponerte de acuerdo en situaciones", ahondaba en la reflexión.
Lo hacía justo antes de que se entrara en el asunto de esa referida intantánea de Ella, su hija con el cantante, en la Feria de Abril subida por Zanetti. "Tampoco me sentó tan mal, pero no fue de mi agrado que yo no pueda subir fotos de mi hija y otra persona sí", puntualizaba antes de pasar de puntillas por el hecho que fuese uno de los puntos candentes de la batalla judicial a la que le llevó una de las voces más representativas de la mejor variedad musical que escuchas en CADENA 100.
¿Cómo es la relación con la familia de David Bisbal?
En cuanto a cómo es su relación con la familia de David, desmentía, de manera categórica que sea mala: "Eso no es así. De hecho, a día de hoy, tengo muy buena relación con su hermana, con su mamá... Son la abuela y la tía de mi hija, y es que lo van a ser siempre. Mi hija tiene 14 años y se entera de todo lo que está pasando". ¿Y con el padre de la criatura? "Bien, muy bien". Es más, explicaba cómo hubo un momento en el que, para templar gaitas, le mandó un mensaje a Rosanna.
No le sentaba nada bien que se le pusiera sobre la mesa que hay ciertos periodistas que sostienen que les utilizó como herramienta en medio de esa batalla. "Yo nunca he intentado hacer ver nada. Soy como soy. Con mi hija nunca he tenido ninguna duda ni tengo que demostrar nada a nadie que no sea ella", era la rotunda respuesta antes de puntualizar sobre el papel que jugó la prensa en el punto y final de uno de los romances sobre los que más se escribió en la época en las revistas del corazón: "Al final, para mí la prensa era algo completamente nuevo y él tampoco lo lleva bien. Él lo explica en cada entrevista. Que, al final, era demasiada presión. Cada movimiento no sé por qué llamaba tanta atención cada cosa que hacíamos. Éramos muy niños y en la vida son muy importantes los tiempos. Yo tenía 24 años y él 25. Para él era algo nuevo y, para mí, aún más nuevo. Si tú no sabes gestionar eso con madurez... Si yo no llego a madurar y a manejar mi experiencia, yo no estaría aquí sentada hablando de mi vida".
A lo largo de esta charla, con un puñado de periodistas delante, aclaraba sobre el hecho de que pudiera no haberse sentido como que tenía su hueco dentro de esa relación. "Él no tenía la responsabilidad de darme mi sitio, mi lugar. Era mía. Y con el tiempo me perdoné no haberlo hecho. Pero la única responsabilidad era mía", comenzaba antes de hacer hincapié: "Todas las relaciones son una montaña rusa. Y a esto es a lo que me refiero con la exposición mediática y que haya tanta prensa preguntándote. Tienes un conflicto, te cogen de esa manera, en caliente... Yo entiendo a la mamá de David también, es su hijo, tiene que protegerlo". Y una de las frases más contundentes que queremos rescatar y que sirve para resumir sus sentimientos es: "David ha sido el gran amor de mi vida. No voy a decir que el único".
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